Maternarnos es un arte que se desarrolla a lo largo de nuestra vida, a través de los vínculos que creamos y los espejos que nos ofrecen. Cuando nos maternamos, asumimos la responsabilidad de nosotras mismas, ganando en autoestima y reflejándolo en todas las áreas de nuestra vida. Esta cualidad permanece con nosotras, guiándonos en momentos de confusión y devolviéndonos a nuestro centro.

 

Aprender a maternarnos es esencial para mantener nuestra salud y vitalidad como mujeres, para evitar situaciones o relaciones perjudiciales y para nutrirnos, amarnos y cuidarnos a nivel físico, emocional y espiritual. Al convertirnos en la madre que nuestra niña interior necesita abrazamos nuestro poder desde dentro hacia fuera.

La construcción de la imagen de nuestra madre interna comienza con nuestro primer referente, nuestra madre. A lo largo del tiempo, esta imagen puede alejarse del modelo real, y es crucial sanar la relación con nuestra madre para abrazar completamente a nuestra madre interna. Comprendemos que nuestra madre nos ofreció lo que pudo en el momento específico de su vida y reconocemos su lucha entre sus necesidades y las de los demás.

Maternarnos implica no solo centrarnos en nosotras mismas y dedicarnos a actividades de autocuidado, sino también realizar un viaje hacia nuestro interior. En este espacio escuchamos las voces de nuestra niña interior herida y aprendemos a ser las madres que esa niña necesita.

Automaternarse se refiere a la capacidad de cuidarte, de suplir tus propias necesidades y de ser tu propia madre. Está asociado a prácticas de cuidado propio y de sanación de las experiencias dolorosas de la infancia. Integrarlo en tu vida trae confort, dulzura y aceptación al momento presente. Es una práctica profunda para conectarte con tu sabiduría interna y ofrecerte espacios reparadores de seguridad, nutrición, compasión y belleza.

 

ELEMENTOS CLAVE DEL AUTOMATERNAJE

 

1. Autocuidado:

Atiende tus necesidades físicas, emocionales y espirituales. Esto incluye desde asegurarte de tener una dieta equilibrada y suficiente descanso, hasta prácticas de bienestar como la meditación y el ejercicio.

 

2. Autocompasión:

Se trata de ser amable y comprensiva contigo, especialmente en momentos difíciles: ¿cómo te hablas?, ¿qué historia te cuentas?. En lugar de criticarte severamente, aprende a hablarte con ternura y empatía: ¿qué estás necesitando?, ¿qué está en tu mano hacer?

 

3. Autoprotección:

Es el desarrollo de límites saludables en las relaciones y situaciones para proteger tu bienestar emocional y los primeros límites que necesitamos establecer tienen que ver con nuestras partes culpadoras, avergonzadoras, perfeccionistas y exigentes. Incluye decir no cuando sea necesario y/o alejarte de personas y lugares que te hacen sentir mal, frustrada, insegura o limitada. Aléjate de los lugares y personas con las que sientas que no puedes ser tú.

 

4. Autovalidación:

En lugar de buscar constantemente la validación y el reconocimiento externo, aprende a reconocer y valorar tus propios sentimientos, logros y necesidades como legítimos y significativos.

 

5. Autocuidado emocional:

Involucra identificar y procesar las emociones de manera saludable, permitiéndote sentir tristeza, enfado o alegría sin juzgarte por ello. Incluye crear espacios para procesar y ordenar tus emociones y pensamientos: escritura terapéutica, terapia, hablar con una buena amiga, … (Dejarte sostener, mostrarte vulnerable,…)

 

6. Desarrollo de la autoconfianza:

Confiar en tu capacidad para manejar los desafíos de la vida, creyendo en tu propia fortaleza interna y tu capacidad para sanar. Tu sistema nervioso está configurado para metabolizar y digerir todas las experiencias vitales y trabajar en él facilita tu capacidad de resiliencia.

 

Todas estás áreas a contemplar en tu día a día pueden verse en lo concreto como:

  • Diálogo interno positivo/posivilista: Reemplazar al crítico interno con una voz interna más amable y alentadora.
  • Tiempos de relajación: Crea rutinas de relajación que incluyan actividades que te reconforten y te hagan sentir bien.
  • Rutinas de bienestar: Desarrolla hábitos saludables que cuiden tu cuerpo y mente (alimentación consciente, ejercicio, prácticas somáticas, descanso adecuado)
  • Exploración emocional: Date el espacio para sentir y procesar las emociones a través de la escritura, la meditación o conversaciones profundas con personas de confianza.
  • Cuida tu entorno: Mantén tus espacios limpios y ordenados. Crea un espacio en casa que promueva la calma y el bienestar. Puedes incluir elementos como plantas, velas aromáticas, música suave y objetos que te transmitan alegría y tranquilidad.
  • Limita la exposición a estresores: Establece límites saludables con las noticias y las redes sociales. Prioriza el consumo de contenido que te haga sentir bien y te inspire.

 

Algunas madres, como humanas que son, no se rigen por patrones o actitudes amorosas, equilibradas, sanas y coherentes, sino que más bien se rigen por un criterio egoísta donde lo que prima es su propio dolor y no tanto estar ahí para sus hijos y las necesidades que estos puedan tener. Pero tener una madre poco amorosa no significa que tengas que renunciar necesariamente a integrar dentro de ti las cualidades de una madre amorosa.

Ahora de adulta tienes la posibilidad de reconciliarte con el arquetipo materno amoroso en tu interior, independientemente de la madre que te haya tocado.

 

Una madre amorosa es:

  • Compasiva
  • Amable
  • Afectuosa
  • Motivadora
  • Equilibrada

 

Cuando empezamos a fortalecer en nosotros las cualidades de una madre amorosa, estamos ayudando a cubrir las necesidades y demandas de nuestra niña herida.

Está en tus manos integrar todas estas cualidades dentro de ti, y en la medida en que vas integrando estas cualidades se va produciendo una mejora en la imagen que tú tienes de tu madre real. Cuando hablo de reconciliación me refiero a un trabajo interior en el que no es necesario cambiar ni modificar nada en tu madre.

Tu función como hija NO es cambiar a tu madre, desde ahí te mueves en una negación constante que perpetúa el conflicto en tu interior. Se trata de aceptar a tu madre, pero cambiar en tu interior lo que no te gusta de ella.

 

En definitiva, no se trata de culpar o cambiar a tu madre, sino más bien de descargar un nuevo programa amoroso que te permita experimentar nuevos sentimientos y emociones hacia ti misma.

Independientemente de cómo sea tu madre real, siempre puedes cultivar dentro de ti las cualidades de una madre amorosa para aprender a amarte y apoyarte a ti misma de forma incondicional desde tu yo adulta.

 

Sostener pequeñas prácticas sencillas que te recuerden «estoy cuidando de mí, me elijo, me respeto, estoy disponible para mí, miro por mí», «estoy aprendiendo a sentir en el cuerpo que merezco ser amada y que me amen», «estoy aprendiendo a descifrar en dónde, con qué y con quién mi cuerpo se siente seguro y amado».

 

De corazón espero, que todo lo que comparto, te ayude a iluminar allí donde más oscuro se ve.

 

Un abrazo lleno de luz y fuerza✨

 

¿Quieres que te acompañe en el proceso?

 

Te acompaño en tu proceso: Te acompaño en ese viaje hacia lo más profundo de ti, a ir soltando todo lo que no te pertenece, a ir poniendo luz a esas partes que tuviste que esconder, ir renunciando a la esclavitud de la aceptación de otros, volver a sentirte segura siendo tú. Sentirte adulta, aceptarte y poder darte la incondicionalidad legítima que un día quizás no recibiste y que aún hoy estás necesitando. Pregúntame sin compromiso.

Manual de autosanación: «HERIDA. Comprender y sanar a mi niña interior» Un viaje a tu interior que se compone de 30 capítulos y 13 anexos. 594 páginas que te ayudarán a identificar tus propias capas de dolor, de qué se compone cada una de ellas, que entiendas la función que cumplieron y de qué te intentaron e intentan proteger, qué las detona y cuál es su secuencia.

¡Únete al canal de TELEGRAM! Un espacio en el que te compartiré herramientas y recursos para reflexionar, crecer y evolucionar juntas. Espero que se convierta en esa ventana donde poder encontrar un poquito de luz que ilumine allá donde más oscuro se ve.

Conoce todas las herramientas y recursos que he creado para ti. Comienza el camino del autoconocimiento, aprende a indagar en ti, a observarte, escucharte, atenderte… Comprende porqué ves el mundo como lo ves y todo lo que puedes hacer al respecto. Tienes todo en la pestaña «recursos».

Suscríbete a la newsletter y descárgate el método«El camino de regreso a mí. un viaje de vuelta». Con este método, te invito a no quedarte en lo obvio, a leer entre líneas, a rascar en la superficie y mirar qué hay detrás de todo lo que te rodea, de tus reacciones, de las experiencias y situaciones que repites y se repiten en tu vida.

Recuerda que en Instagram y Facebook te comparto herramientas a diario.

Puedes escucharme en «SOY HUMANA», el podcast de @tucambiocomienzaaqui en el que cada semana hablamos de todo aquello que nos preocupa a diario y que de alguna manera nos impide ver todo aquello que sí funciona, que sí va y que sí tenemos. En cada episodio hablamos de cómo lidiar con todo eso que, de alguna manera nos bloquea, nos limita y nos hace olvidar que somos humanos.

 

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle información relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Leer Más